El eje de la exposición va dirigido a la incapacidad adquirida de la sociedad de experimentar placer ante estímulos físicos típicos, como la comida o el tacto, estímulos como el trato con otros individuos, charlar, intercambio de impresiones o sentimientos... placeres mundanos que se pierden al entrar en el vicio cotidiano de la dinámica de la rutina, que ciega esos pequeños matices placenteros.

Anhedonia, término Griego, en nuestra cultura es definido como la incapacidad para experimentar placer, la pérdida de interés o satisfacción en casi todas las actividades. Se considera una falta de reactividad a los estímulos habitualmente placenteros. La cultura tiene una gran influencia, definiéndose entonces como anhedonia social.