Exposición del artista Sylvain Couzinet-Jacques, en la que utiliza el espacio físico como terreno para la reflexión social.

¿Qué parte de la realidad se nos sirve de forma interesada? ¿cuál permanece oculta? ¿qué discurso sobre la crisis tiene que ver con lo que somos y con lo que podemos ser? ¿cuál se traduce a medida de los intereses políticos o económicos? Son algunas de las cuestiones que Sylvain Couzinet-Jacques deja en el aire con 'Sub Rosa', la exposición que muestra en la Alianza Francesa de Málaga en colaboración con la Casa de Velázquez de Madrid, donde el autor se encuentra realizando una residencia artística.

“Nuestro punto de vida se oscurece, crisis tras crisis, a escala global. La gente sólo contempla aquello que cree posible, confortada por el tipo de representación visual que apoya la idea de la crisis”. El artista busca ampliar este punto de vista y lo hace en sentido literal, creando nuevos territorios físicos, como ya hizo en una de sus obras más conocidas, 'Edén'.

La expresión 'Sub Rosa' quiere decir literalmente «bajo la rosa» y evoca el secreto, la confidencialidad. Para este proyecto Couzinet-Jacques instaló unos sensores en el jardín de la Casa de Velázquez para grabar en directo datos del ecosistema local. Algunos de los sensores detectaban las fluctuaciones de temperatura y de luz durante el día. Otros percibían los cambios repentinos debidos a los movimientos y sonidos emitidos por los visitantes. Los datos fueron enviados a un sintetizador modular en el taller de Couzinet-Jacques, creando de este modo unos paisajes sonoros autogenerados. Los ritmos dependían de los parámetros del jardín y el paisaje sonoro podía ser escuchado tanto en el jardín como en el taller. La música era transmitida por un emisor de FM en el límite de la legalidad.

Durante el día, unos personajes se pasearon en el jardín con unas pequeñas radios. Al final de sus deambulaciones entre la vegetación se subieron a un misterioso coche negro que dio lugar a la performance que acompañó la inauguración de la muestra. Para su desembarco en Málaga el artista marsellés ha preparado una nueva performance subversiva, que irá acompañada de una intervención de las ondas de la FM local.

La Casa de Velázquez se encuentra cerca del Palacio de la Moncloa, residencia oficial del Gobierno español, y en una zona con varios edificios oficiales. Las reuniones semanales del Consejo de Ministros se celebran a escasos metros del jardín en el que fueron instalados los sensores. No hace falta recordar que el secreto de los datos que flota en el aire es determinante.

Sylvain Couzinet-Jacques ha pirateado metafóricamente estos datos mediante las rosas y el ecosistema del jardín. Mediante este acto simbólico, ha vuelto a ocupar un espacio desmarcado, apropiándoselo y dándole un nuevo sentido. Diferentes realidades físicas, datos científicos, informaciones de un mundo en declive se combinan para configurar un nuevo territorio, un micromundo.

Además de estos paisajes sonoros, la exposición está compuesta por dos fotografías de gran formato, además de dos pantallas que mostrarán dos vídeos de 20 minutos en slow motion que el artista ha realizado en exclusiva para la muestra en la Alianza Francesa me Málaga utilizando las imágenes que captaba con su cámara. Sylvain ha filmado el espacio del Arco de la Victoria en Madrid, construído durante la dictadura de Franco como símbolo del triunfo en uno de los ejes principales de acceso a la capital. Las imágenes se presentan como una reflexión sobre la utopía: esta pieza de arquitectura fascista es símbolo de una historia pasada pero ahora esta ocupada por jóvenes que hacen 'botellón' y quitan piezas, despellejando el monumento y usando las placas de mármol para sus propios fines, como crear una pista de skate. El poder es temporal, es uno de los mensajes subyace bajo los efectos de la luz filmada por Couzinet_Jacques, que se pregunta también sobre la posibilidad de nuevos fascismos.