Tierra batida plantea la exposición como un yacimiento activo, donde los tiempos, restos y relatos se cruzan, y no como un conjunto ordenado de obras. Inspirada por la ruina fotográfica de Robert Smithson y en diálogo con la instalación The Worlds We Tell: Threshold de Kapwani Kiwanga, la muestra convierte la colección del CAAC en un archivo vivo, donde las capas se mezclan y se disputan, y cada obra funciona como un artefacto que porta, traza y transforma la memoria. Las piezas de artistas como Belén Rodríguez, Valie Export, Mercedes Pimiento, Jorge Yeregui, José Guerrero, Maria Thereza Alves o Isabel Villar, entre otros, invitan a pensar la historia no como secuencia cerrada sino como un proceso en constante construcción y derrumbe. La exposición propone compostar la memoria, batir la tierra de lo patrimonial y conceptual para generar nuevas conexiones, relatos y significados que brotan del contacto entre pasado y presente.