BORIS CHARMATZ
SOMNOLE , un solo donde destila intereses y sensibilidades presentes en sus más de treinta años de carrera.
El trabajo de Charmatz está atravesado por el interés por someter la danza a restricciones formales que redibujan su campo de posibilidades. El coreógrafo, bailarín y creador de proyectos experimentales como la escuela efímera Bocal,
El Musée de la danse o Terrain, se pregunta por el estado de los cuerpos contemporáneos, y articula performances y formatos híbridos para lugares y espacios muy diferentes –desde escenarios a museos, instituciones ficticias o al aire libre–. Las propuestas de Charmatz relacionan el contexto en el que se despliegan con los repertorios de la danza y su transmisión, así como el deseo de conectar la teoría con las sensaciones e intensidades del cuerpo que baila.