Son cada día más las opciones interactivas de las que disponemos para disfrutar de nuestros momentos de ocio. Sin duda, la música es una de las más utilizadas ya que puede llegar a incidir en el estado de ánimo de cualquier persona de manera inmediata. Además, la música es también capaz de hacerte viajar en el tiempo.

El “arte de las musas” va más allá de lo mencionado, considerándose el complemento perfecto de muchos otros productos audiovisuales que sin ella perderían parte del valor que tienen.

Hace algunos años, las bandas sonoras cinematográficas traspasaban fronteras, ya que millones de personas eran capaces de identificar los primeros acordes de un tema con el largometraje en el que aparecían, llevándolas a recordar escenas de esa película.

A finales del siglo pasado, fue el ámbito de los videojuegos el que comenzó a irrumpir con fuerza. Aquí también estaba presente lo musical. El crecimiento de todo lo relacionado con los videojuegos ha ido creciendo a pasos agigantados alcanzando lo que llegan a ser actualmente. Los videojuegos se han convertido en estos momentos en auténticas superproducciones, han ganado en realismo y han logrado aumentar también el cuidado de características como la jugabilidad, la parcela gráfica y sonora fuera de toda duda. Esto último ha llegado a convertirse en un icono, ya que el éxito de juegos como Uncharted o The Last of Us se habría quedado en nada sin sus bandas sonoras.

Pero la aplicación de lo musical va más allá de los videojuegos. Ahora también somos capaces de asociar la música a plataformas de juego y apuestas online. Las máquinas tragaperras online en internet llegan a ofrecer a millones de personas diariamente horas de diversión. A diferencia de los productos físicos, su nueva modalidad online ha permitido ganar en el aspecto visual y sonoro consiguiendo potencial la experiencia del usuario.

Algunos de estos espacios se han basado en éxitos del cine y la televisión y con el tiempo se le han incorporado bandas sonoras de otros ámbitos. Así, se consigue garantizar que la música es rápidamente identificable ya que permite al consumidor imaginar lo que nos puede ofrecer.

En conclusión, la música rige todos los ámbitos y la vida de millones de personas en todo el planeta. Es un arte que no se ha modificado con el paso del tiempo, ya que desde etapas ancestrales ya era utilizada para expresar sentimientos y emociones.