Según el estudio ‘EPISER 2016’, presentado este año por la Sociedad Española de Reumatología (SER), se estima que la osteoartrosis, comúnmente llamada artrosis, tiene una prevalencia en España del 30% en la población mayor de 40 años. Esta patología, que es más común en mujeres, tiene carácter crónico y de evolución lenta. Por esta razón, los especialistas defienden el uso de las infiltraciones como método seguro y eficaz para reducir el dolor y recuperar plenamente la funcionalidad de la zona afectada.
La Clínica HLA Santa Isabel ha incorporado a su cartera de servicios las infiltraciones de factor crecimiento más ácido hialurónico. El jefe del Servicio de Traumatología, el Dr. Álvaro Mesa, explica que este tratamiento “combina sinérgicamente los efectos clínicos de los factores de crecimiento con los beneficios del ácido hialurónico, reduciendo la degradación, la inflamación, el dolor y la rigidez de las articulaciones y presentando una mayor recuperación y prevención del desgaste del cartílago que otros métodos”.
La infiltración se lleva a cabo con un preparado obtenido a partir de plaquetas del propio paciente, y que es rico en factores de crecimiento, componentes clave para la regeneración tisular (conjunto de fenómenos que conducen al cierre de una herida). Todo esto, combinado con ácido hialurónico, el elemento principal del líquido sinovial y muy importante en el descanso del dolor. “Según estudios clínicos, este tipo de técnica proporciona un alivio significativo y mejora funcional en el 87,3% de los pacientes que han tenido una respuesta insatisfactoria a una terapia previa de solo ácido hialurónico”, aclara el Dr. Álvaro Mesa.
Un tratamiento paliativo y curativo
Este procedimiento es especialmente beneficioso en osteoartritis de articulación de rodilla, que atesora el 14% de la prevalencia total de esta enfermedad. No obstante, cualquier persona que la padezca puede beneficiarse de este tipo de tratamiento.