ENTREVISTA
MANU TENORIO: “EL VILLANCICO HA SIDO UNA BONITA TERAPIA PARA MÍ”
Por
Redacción
Post #285

Esta Navidad, más que nunca, necesitamos alegría y unión, tras este difícil año... un rayo de esperanza e ilusión viene a alegrarnos estas fechas tan señaladas. Manu Tenorio nos ofrece una nueva versión de "Alegría, Alegría", donde prima el optimismo y el buen rollo.

Al ser trianero, ¿de dónde dices que eres, de Sevilla o de Triana?

Personalmente esos desmarcamientos de “yo soy de Triana, yo soy de Sevilla” procuro no practicarlos porque me siento como un andaluz universal. Pertenezco a Andalucía. Siempre he puesto de ejemplo a los catalanes. Los catalanes dicen que son catalanes y punto. Pues yo soy andaluz. Estoy orgulloso de pertenecer a la tierra a la que pertenece Cádiz, Huelva, Jaén… Soy sevillano pues a Sevilla no hay por donde la cojas. Ser andaluz es un regalo.

 

Cuando has salido de Andalucía,  ¿has notado esa distinción en base a nuestro acento? Los artistas sois mucho de reivindicar el acento.

Hay muchas distinciones. Los andaluces tenemos un latel motiv de manera natural que nos lo implanta nuestra propia tierra en el ADN. No solamente se refleja en el acento, sino que también en nuestra manera de vivir, de disfrutar de la vida, nuestra manera de tomarle la temperatura a la vida. La virtud de que tenemos arte, salero, de que tenemos un gracejo particular nuestro que, realmente, por más que lo queramos comparar con otros acentos de España, es muy complicado. Tenemos un rollo hablando que es muy musical.

 

¿Cómo estás pasando las navidades?

Las navidades se han arreglado un poquito. Hemos hecho una nueva versión de un villancico que grabé hace muchos años, en 2001, que se llama ‘Alegría, alegría’. Lo volví a regrabar entero con nuevos arreglos musicales, le di un giro de 180 grados porque la versión que sonaba siempre todos los años no dejaba de ser una versión antigua. Tampoco estaba en plataformas digitales como Spotify, solo estaba en YouTube. Quise hacer una versión nueva para transmitir alegría e ilusión. Si revisas la letra tiene mucha chicha por el momento histórico que estamos viviendo porque, aún siendo un villancico donde las letras son más sencillas, tiene mucha guasa. Este villancico y el videoclip lo hice pensando en los demás para que disfrutaran pero al final a quien más le está arreglando la vida es a mí. Me he dado cuenta de que he sido muy feliz haciendo el videoclip. He disfrutado de Arturo Valls, El Sevilla y Alex Odogherty. Ellos me han transmitido muchas emociones al ver su generosidad. Ha sido una bonita terapia para mí. Nunca me dio por pensar que me iba a servir a nivel anímico.

 

Menudos elfos te has buscado...

Éramos como el Rat Pack (ríe). Como Frank Sinatra, Dean Martin y el otro. El Rat Pack español.

 

Muy buena manera de poner fin a este 2020...

Ha sido un año absolutamente devastador. El 2019 lo terminaba celebrando muchísimos proyectos nuevos que tenía entre manos, muchas cosas nuevas que me iban a pasar, estaba muy ilusionado porque había reunido a un equipo de gente perfecto para trabajar y al final todo se me cayó por los suelos. Iba a ir a México a cantar en eventos muy importantes allí, como los Premios Platino. Me negué un poco en dejar que la gente concluyera el año de una manera a tan triste y tan dolorosa con toda la gente que se ha ido y entonces por ese motivo le metí caña al villancico y por lo menos a empeñarnos en que haya un par de ocasiones en que la gente se emborrache, levante las copas, cante un rato y despidamos este año con un poquito de alegría. El mismo villancico lo dice. 

 

¿No te has planteado hacer un tik tok?

No, no la verdad (ríe). Ya paso del tik tok. Con Facebook, Instagram y Twitter para mi es suficiente. En el tiktok me siento muy desubicado. No sé si tengo que encontrarle la manera de llevarlo a mi terreno pero me da un pelín de pereza. No me veo.

 

¿Dónde verás las preuvas? No sé si por compromiso lo verás en La 1 por tu amiga Chenoa...

(Ríe). Pues lo voy a ver, no por compromiso. Tanto en tu familia como en la mía la tradición es verlo en la 1. En fin de año me quedaré con mi familia en mi casa, poner algo de comer, porque ya estamos de comer y beber hasta las orejas. Me lo tomo como un día normal. Nos empeñamos como que ese día tiene que ser un día fascinante, tienes que pegarte una super fiesta y sencillamente esa obligación le quita la magia al tema. 

 

¿A ti también se te repite la cena de Nochebuena?

A mi también (ríe). Pero ya al final las cenas de este tipo lo que hago desde el minuto uno es entrar con el pie puesto en el freno. Nos quejamos mucho pero al final las mesas están llenas de todo. Siempre sobra y siempre se termina tirando comida. Pero en mi casa eso no pasa porque me gusta que se consuma lo que se va a comer. 

 

Me gustaría rebobinar unos meses atrás, al confinamiento ¿Tuviste una especie de remember que te teletransportó a tu infancia, no?

De pequeño hubo un año en el que no tenía colegio y mi abuela ese año me enseñó a leer en la cocina que tenía vistas a l patio. Algo muy andaluz, muy de Sevilla, muy de Triana. En este confinamiento la vida me ha puesto una tesitura que prácticamente he hecho lo mismo con mi hijo todas las mañanas, igual que mi abuela en aquella época. Es curioso, es como si la vida se volviera a repetir de nuevo la misma etapa  y también en una cocina junto a una ventana que daba vistas a un patio.

 

En pleno confinamiento, en abril, publicaste ‘El resto de mi vida’, una canción muy bonita pero muy triste. 

Veía a todo el mundo escribir canciones motivacionales y a mi realmente lo que me ha horrorizado es cómo se estaba muriendo la gente y no nos dábamos cuenta. De hecho todavía no nos damos cuenta. ¿Todavía estamos en este plan con la que hemos pasado? Me parecía muy violenta la forma en la que se estaba yendo la gente. Tengo muchos amigos que han perdido a sus seres queridos con el doloroso hecho de que no se han podido despedir de ellos. A mí me sale del corazón hacerle un homenaje a esas personas que no se pudieron despedir. Para mí era una canción que nunca me hubiera gustado componer pero me parece que era necesaria para aquellas personas que han perdido a sus seres queridos.

 

El pasado lunes nos dejó Armando Manzanero, un mito de los boleros. Pudiste cantar junto a él “Aquel señor”. De todos las conversaciones que tuviste con él, ¿con qué te quedas?

Ayer un fan me envió una entrevista con él precisamente hace 20 años en aquel programa en el que canté con él y ponían de relieve que me parecía increíble cómo un tío con un talento tan enorme, uno de los mejores compositores a nivel universal podía ser tan humilde y tan sencillo. Desprendía una luz muy natural. También estuve en un homenaje que se le hizo. Siempre me pareció fascinante el contraste de que yo estaba con él sabiendo que estaba con un genio, de decir “estoy hablando con un genio vivo”. Para mí era como un dios de la música. Por otra parte él me estaba dando las gracias por haber ido a verlo y por cantar con él y.. (ríe) era como que “gracias a ti”. 

 

‘Noches de Bohemia’ es una canción que te va a perseguir toda la vida, ¿alguna vez la has llegado a aborrecer?

Para nada, no he llegado a aborrecer ninguna de las canciones que pertenecen a mi repertorio. Son canciones que el público ama. Forman parte de mi vida y mi historia. Sería absurdo aborrecerlas. Son canciones maravillosas que hay que reivindicar y disfrutar en el escenario.

 

Hablando de escenarios, ¿tienes en mente volver?

Sí, estamos preparando nuevos proyectos. porque todos necesitamos trabajar independientemente para llevar un sustento a casa y para que la rueda siga girando. La mente es muy débil y necesitamos trabajar para tener saneada nuestra cabeza. Necesitamos estar funcionando porque trabajar nos da salud mental. Estoy preparando un proyecto muy interesante con José Losada que es un producto maravilloso y muy conocido en España. Por fin tengo la oportunidad de trabajar con él. En el primer trimestre del año daremos a conocer mi próximo trabajo. Vamos a empezar a hacer algunos conciertos acústicos para adecuarlos a los aforos permitidos. 

 

¿Qué le pides al 2021?

Le pido que la gente pueda volver a trabajar con normalidad, que la vacuna cumpla su función y que volvamos a nuestra antigua normalidad. Ver a la gente feliz y que cada vez que me siente con amigos, mi mujer, manager o vecinos no tengamos que volver a hablar otra vez de la pandemia y el virus, que es la conversación de todas las mesas. 

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