El próximo 26 de enero se celebra el Día Mundial de la Educación Ambiental, una fecha que supone la ocasión perfecta para reconocer la labor desempeñada por la comunidad educativa, desde los educadores ambientales, comprometidos con una sociedad más concienciada, hasta los docentes, quienes, desde sus aulas, inculcan a los más pequeños valores como el respeto por el medioambiente y el amor por la naturaleza.
Así, aunque la educación ambiental debería estar presente los 365 días del año, una cita como esta ayuda a visibilizar, aún más, la necesidad de ponerla en primer plano y hacer de ella algo imprescindible en el día a día. Por eso, este año, Naturaliza, el proyecto de educación ambiental de Ecoembes, propone a los docentes y directores de centros educativos de todo el país sumarse a ‘La Semana Redonda: poniendo el planeta en el centro de la educación’, una iniciativa que nace con el objetivo de animar a la comunidad educativa a emprender acciones que promuevan, aún más, el conocimiento y el respeto del entorno natural entre sus alumnos y alumnas.
En este sentido, Naturaliza propone una serie de actividades y recursos educativos gratuitos para que, a lo largo de los cinco días de la semana, el medioambiente entre en las aulas de una forma activa, fomentando el pensamiento crítico entre los alumnos, con la finalidad de que estos aprendan a conocer el ecosistema humano y natural de su barrio o pueblo y propongan ideas para mejorarlo. Los profesores y profesoras interesados en participar en ‘La Semana Redonda: poniendo el planeta en el centro de la educación’ pueden hacerlo a través de https://www.naturalizaeducacion.org/semana-redonda-de-la-educacion-ambiental/.
El maestro, figura clave para inculcar el respeto por la naturaleza
Precisamente, Naturaliza considera como esencial la figura del maestro para despertar la conciencia ambiental entre sus alumnos. Por ese motivo, apuesta por facilitarles los recursos y herramientas necesarios, ofreciéndoles también un acompañamiento y asesoría continua de mano de educadoras ambientales para que puedan continuar con su compromiso por llevar una ‘mirada ambiental’ a sus aulas.
Así, gracias a los más de 1.268 profesores Naturaliza que forman parte del proyecto en 644 colegios de toda España, más de 59.000 alumnos y alumnas aprenden cada día a respetar y amar la naturaleza de una forma transversal en sus clases de Matemáticas, Lengua, Ciencias Sociales y Ciencias Naturales. En concreto, en Andalucía, 94 profesores ya se han unido al proyecto en 73 centros educativos de la región, trabajando para inculcar valores ambientales a todos sus alumnos.
“Con esta novedosa iniciativa queremos poner en valor la gran labor desarrollado por los docentes en hacer del medioambiente algo que esté en el día a día de sus alumnos. Sin duda, la educación es un pasaporte a muchos mundos, como a la tecnología, la ciencia, las letras…, pero nuestras niñas y niños solo podrán acceder a ellos desde un planeta: el nuestro”, explica Nieves Rey, directora de Comunicación y Marketing de Ecoembes.
Sobre Naturaliza
Naturaliza – aprendizaje ambiental activo - es el proyecto de educación ambiental de Ecoembes que nace con el objetivo de impulsar la educación en medioambiente en el sistema educativo. Ofrece formación y recursos a los docentes de Educación Primaria para que introduzcan el medioambiente en las aulas de forma transversal en asignaturas troncales (Matemáticas, Lengua, Ciencias Sociales y Ciencias Naturales) y fomenta el aprendizaje al aire libre a través de propuestas para impartir clase en el entorno. Ya son 1.268 los profesores de 644 colegios de España que forman parte de la red Naturaliza.
Sobre Ecoembes
Ecoembes es la organización ambiental sin ánimo de lucro que coordina el reciclaje de los envases de plástico, las latas y los briks (contenedor amarillo) y los envases de cartón y papel (contenedor azul) en España.
En 2019, se reciclaron más de 1,5 millones de toneladas de envases de plástico, latas y briks y envases de cartón y papel en todo el territorio nacional. Gracias a ello, se obtuvieron numerosos beneficios ambientales, como evitar la emisión de 1,67 millones de toneladas de CO2 a la atmósfera o ahorrar 6,36 millones de MWh. Asimismo, se ahorraron 20,74 millones de metros cúbicos de agua.