La pasada noche del miércoles 5 de septiembre pudimos asistir al pregón literario de la XX Bienal de Flamendo de Sevilla. A las nueve y media de la noche, en el Palacio de las Dueñas, donde nació Antonio Machado, el escritor roteño Felipe Benítez Reyes, conocido poeta y narrador, pronunció su pregón lleno de "fantasmas", como dijo. Evocó recuerdos de personajes flamencos, de amigos de la cultura como Fernando Quiñones o Pepe Romero, y nos dejó reflexiones muy certeras sobre el valor universal de la música (que, en realidad, nos universaliza a todos), y, en especial, sobre el flamenco, partiendo de anécdotas y vivencias personales como aficionado en su pueblo gaditano, Rota. No faltó una relación, breve pero ilustrartiva, de letras flamencas de distinta temática y expresión, como tampoco alguna referencia a tópicos que la investigación reciente está rebatiendo, como la tan traída y llevada etapa clandestina, hermética del flamenco.Como colofón, siempre extraordinario, un cante flamenco, unos pregones "ajondados" con precisión por Tomás de Perrate, que nos dejó con la miel en los labios por no seguir con algún otro cante. Otra vez será... Y ahora queda disfrutar de la Bienal, que cumpla, ya, cómo pasa el tiempo, cuarenta añitos. Que vengan otros cuarenta más, como mínimo, y que lo veamos todos. Suerte a los organizadores.