Ópera grabada en la Arena de Verona, Italia.
El barbero de Sevilla es sin duda el título de Rossini más conocido y querido del mundo, pero también en el anfiteatro de Verona a partir de las tres primeras actuaciones de 1948: hace exactamente 70 años.
La producción de Hugo de Ana, en la que el anfiteatro romano de la Arena de Verona se convierte en un enorme jardin del amor, un laberinto de setos y rosas gigantes, como un lugar para las intrigas del melodrama más famoso y querido de Gioachino Rossini, enriquecido por la divertida coreografía de Leda Lojodice y caracterizado por las rosas sugerentes y gigantescas que enmarcan la historia de Rosina, del Conte d'Almaviva y del factotum Figaro.