Helios Estévez tenía solo meses de edad cuando en 1936, al estallar la Guerra Civil española, su padre, un republicano anarquista, abandonó su pueblo para ir al exilio. Ahora, 80 años después, viaja hasta la casa de su padre para traer la maleta con la que aquel llegó a México en 1941. Con 19 años Helios Estévez llegó a este país con una misión: conocer a su padre y reunir a su familia para acabar con el dolor de su madre, incapaz de soportar la larga ausencia de su marido.