XVIII BIENAL DE FOTOGRAFÍA DE CÓRDOBA
MARISA BENITO
En el contexto postfotográfico de la era digital nos relacionamos con las imágenes de otra manera; tienen otros significados y se han desmaterializado, se han convertido en elementos sin cuerpo, efímeros y sobreabundantes. El paso del proceso analógico al digital ha devenido en un cambio de paradigma. Las fotografías familiares eran un tesoro que pasaba de generación en generación que se podían mirar y tocar para evocar el recuerdo de un momento o un ser querido. Tenemos la memoria fragmentada entre el papel fotográfico y las pantallas. Es fácil encontrar una foto en nuestros álbumes, no tan fácil encontrarla entre cientos de archivos y carpetas. Esas fotografías si no las miramos dejan de existir. ¿Cómo será la memoria de las generaciones digitales? Ya no tendrán una caja en la que guardar las fotografías de su vida, de su historia.