CINECLUB DEL 27.
Mädchen in uniform, L. Sagan, 1931)
Leontine Sagan ocupa un lugar singular en la historia del cine. Nacida como Leontine Schlesinger en una familia judía de clase media en Viena (o Budapest según otras fuentes) cuando era capital del Imperio Austrohúngaro se trasladó a Suráfrica a los diez años estudiando en una escuela alemana de Johanesburgo. De nuevo en Europa tras la Primera Guerra Mundial, se familiarizó con las técnicas del arte dramático junto al reputado Max Reinhardt, absorbiendo el estilo de sus imaginativas escenografías que luego aplicaría en sus propios montajes.
Trabajó en el cine y el teatro como directora, directora de segunda unidad, montadora, ayudante de dirección y actriz, aunque sólo firmaría tres cintas en quince años. Sus primeras apariciones en pantalla, fueron con una joven Leni Riefenstahl en tres cintas del, entonces popular, género de montaña, entre ellas La montaña sagrada (1926), debut como directora de la futura autora de los grandes documentales de los años nazis.
La primera película de su breve filmografía, y la más recordada, es Muchachas de uniforme. Esta película apareció al año siguiente del primer film sonoro alemán (El ángel azul de J. von Sternberg) y el mismo año que otros títulos capitales como M, el vampiro de Dusseldorf o Berlin Alexanderplatz.
Considerada como la primera película abiertamente lésbica de la historia, su influjo llegó hasta Hollywood. Tras verla, el productor Irving Thalberg de la MGM moderó sus remilgos a un beso entre mujeres en La reina Cristina de Suecia con Greta Garbo. Eso ocurrió ya en 1935, pese a la reciente entrada en vigor del Código Hays de censura el año anterior. Por lo que a esto se refiere, la película sufrió importantes cortes en aquellos países en los que no fue directamente prohibida. Las injerencias en la distribución de la cinta llegan al punto de que la versión estrenada en los Estados Unidos finaliza de un modo radicalmente distinto a la exhibida en Europa.