Nominada al Oscar a Mejor Película Extranjera y Sección Oficial en el Festival de Cannes, es la obra maestra de Berlanga, en la que fijó su incisiva mirada en un putrefacto universo provinciano. La perfección con que se mueven los hilos de su estructura coral y el feroz pero lúcido discurso que encierra lo convierten en un título irrepetible dentro de la historia del cine español. Pocas veces se ha combinado con tanto talento la acidez con la frescura. En una pequeña ciudad provinciana, a unas burguesas ociosas se les ocurre la idea de organizar una campaña navideña cuyo lema es: "Siente a un pobre a su mesa". Se trata de que los más necesitados compartan la cena de Nochebuena con familias acomodadas y disfruten del calor y el afecto que no tienen. Plácido ha sido contratado para participar con su motocarro en la cabalgata, pero surge un problema que le impide centrarse en su trabajo: ese mismo día vence la primera letra del vehículo, que es su único medio de vida.