FESTIVAL MÚSICA EN SEGURA
Concurso Internacional de Canción de Autor en Castellano
En memoria al cantautor argentino Gabo Ferro, que pisara el escenario segureño en 2017, Música en Segura convoca Canciones que un Hombre no Debería Cantar.
Hay artistas, como hay personas en la vida, que te animan a saltar. En un salto que es primero hacia adentro, que sólo así puede ser algo afuera. Hay artistas, como hay personas, que te abrazan en el momento justo, no para agarrarte; te abrazan para todo lo contrario, para cargarte en su abrazo de fuerza para seguir. Cuando el mundo duele, son indispensables.
Quizás la única distinción posible entre estos artistas y estas personas, sea su alcance. Hasta dónde llegan sus brazos. Porque hay artistas que se hacen parte de nuestras vidas, que logran con su obra entrar a nuestro cotidiano, hablarle a lo más hondo de lo que somos y así, sin conocernos, conocernos mejor que nadie.
Gabo Ferro es de este linaje. Un artista que navegó con su obra las aguas a veces frías de lo que es vivir. Vivir en su lugar y en su tiempo. Cada una de sus canciones contiene en su forma, en eso tercero que poesía y música pueden ser en una canción, llaves que abren puertas íntimas e invisibles a lo que somos, más allá de lo que se ve.
Quizás por eso la muerte de un artista resulte un oxímoron.
Hoy que Gabo está acá en todo lo que nos dejó, la potencia de lo que contienen sus canciones nos interpela tanto o más que antes. Quedamos en soledad cara a cara frente a ellas.
En un silencio cargado de inflexiones y calor.
Canciones que siguen cantándonos con su prodigiosa voz, con su decir. Que cantamos con él como nos sale.
Canciones que como el hambre, empujan.
Esta invitación, esta convocatoria, germina en la tierra que fundó Gabo a fuerza de canciones. A fuerza de cuestionarlo todo en sí, de cuestionar todo lo dado, de -como los trovadores de antaño- cantarnos lo que vio, en guerras y en celebraciones, íntimas y compartidas.
No busca esta invitación abrir lugar a la repetición, no busca otrxs Gabo. Sí busca ser una casa en la que la obra de Gabo se admira, se cuida, se guarda, con las puertas abiertas para que quienes aún no la conocen puedan acercarse a ella. Y busca también ser cantera, tierra fértil, terreno propicio, para que quienes tengan en su cuerpo canciones puedan aquí compartirlas, sembrarlas, no para hacer lo que otrxs ya hicieron, sino para hacer su mejor canción.