Se constituyó en 2018, siendo el primer premio que se concede desde la iniciativa privada y a través de una fundación a estas disciplinas.
Su objetivo es el reconocimiento de la excelencia y originalidad de proyectos arqueológicos y paleontológicos dirigidos por equipos de investigación españoles, y desarrollados tanto a nivel nacional como internacional, sin restricciones de culturas o períodos históricos. En lo referente a los proyectos de paleontología, han debido estar relacionados con la evolución humana.
Los proyectos preseleccionados se someterán a la valoración de un jurado internacional con reconocido prestigio en el ámbito científico y cultural.