Las reliquias y relicarios de la Capilla Real
En el V Centenario del traslado de los Restos Reales desde el Monasterio de San Francisco de la Alhambra a la Capilla Real
Por disposición del Emperador Carlos de 1520, repetida en 1521, el 10 de noviembre de ese año bajaron los Restos reales, sepultados en el monasterio de San Francisco de la Alhambra, a la Capilla Real, cuya construcción y decoración estaban terminadas. Se conserva el relato de ese solemne acto. Participaron todas las Instituciones granadinas, eclesiásticas y civiles, junto con el pueblo. En la descripción de la vistosa procesión por Cuesta de Gomérez, plaza Nueva, Zacatín y plaza de Bibrambla hasta la Capilla pasando por la antigua Catedral, se describe el lugar y modo en que venían las reliquias de la Reina Isabel. Después de las cruces de cofradías, parroquias y catedral, lo primero eran el estandarte y real y los dos guiones y tras ellos los cuerpos reales “en su carro triunfal dorado” llevado por altas autoridades de la Ciudad. “Tras del carro venían muchos sacerdotes, revestidos con muchas reliquias e portapaces e Imágenes en las manos y, en pos dellos venían unas Andas, muy ricamente ataviadas, con todas las Reliquias de la Capilla Real