Con Enric Benito Oliver
“Morir es normal”, nos dice Enric Benito, lo que no quita que “morir bien sea de vital importancia”. Y es que morir no es una enfermedad que se pueda tratar, sino un proceso en el que nuestra habitual perspectiva de la realidad se disuelve y se abre la oportunidad de atisbar lo trascendente, lo numinoso y lo sagrado.
Haber acompañado a muchas personas en su tránsito a la muerte le permite a Benito afirmar que cada uno muere como ha vivido y, por tanto, una vida plena propicia una buena muerte. Con todo, el proceso de morir suele atravesar una primera fase caótica de resistencia, a la que siguen otras de aceptación y trascendencia. Quien se va necesita aceptar lo vivido, conectar con lo querido y abandonarse a lo pertenecido. Y a todo esto, que no siempre resulta fácil, los que acompañan al muriente pueden ayudar con su hospitalidad, presencia y compasión.