La historia de Luis Rojas-Marcos es el resultado de una enorme capacidad de superación. Fue un niño distraído, con problemas de aprendizaje, hiperactividad y fracaso escolar. Pero acabó siendo un avalado psiquiatra de fama internacional.
Tras licenciarse como médico en Sevilla, emigró a Nueva York a finales de los 60 para estudiar psiquiatría. Tras más de 40 años de trayectoria en Estados Unidos, sus trabajos de investigación y sus pioneras aportaciones en este campo le han llevado a convertirse en un referente para médicos, psiquiatras y psicólogos de todo el mundo. En los años 90 fue el máximo responsable de los Servicios de Salud Mental, Alcoholismo y Drogodependencias de la ciudad de Nueva York.