Hezbolá lucha contra Israel desde los años 80. Ahora, muchos quieren unirse a la milicia chií, pero para derrotar a otro enemigo: el coronavirus. Hezbolá demuestra una vez más que funciona como un Estado dentro del Líbano.
Traducido literalmente como el “Partido de Dios”, es a la vez un movimiento religioso, un grupo armado y un partido político que participa en las elecciones.