DE LA OTREDAD AL MAINSTREAM
La idea del criminal nato fue propuesta en 1876 por Cesare Lombroso con la publicación Il uomo delinquente. En esta obra, el psiquiatra y criminólogo italiano quiso demostrar que la existencia del individuo criminal se debía a caracteres psicológicos y sociales, además de anatómicos, y relaciona el tatuaje como un signo de criminalidad. Para la sociedad de su época, tatuarse era un sinónimo de desviación social y de proclividad al delito.
En esta sesión se analizará, por un lado, la vertiente más oscura del tatuaje, desde su uso como castigo, como ocurría en China o Japón, hasta la utilización de este arte tradicional como marca distintiva de los miembros de organizaciones criminales. Y, por otro lado, se planteará si en la actualidad el estigma persiste o la práctica del tatuaje ya ha conseguido la aprobación y la admiración de la sociedad, para incluso convertirse en moda.
A cargo de:
Mik Garreta es divulgador del arte del tatuaje y fundador de las Convenciones Internacionales de Tatuaje en España. Tras más de veinticinco años, es considerado un referente en la industria y un experto de la historia marginal del tatuaje.
Cristina Vara Ocón es Doctora en Historia Contemporánea por la Universidad de Granada y profesora de Historia e Historia del Arte en el Centro de Lenguas Modernas de la misma. Es experta en la criminalidad, el orden penal y los mecanismos de control social en la España decimonónica.
Laura Cubero es directora de la Baum Fest Barcelona Tattoo Expo, con más de veinticinco años de experiencia en la organización de festivales sobre tatuaje y arte urbano. Su labor la ha llevado a comprender la gran evolución del tatuaje en nuestro país durante las últimas décadas.