Sensibilidades, identidades, estilos de actuar y vivir que son característicos de la juventud se recrean de forma similar en todos los rincones del mundo. No obstante, hoy en día, ante el terrorismo, la llegada masiva de refugiados o las graves crisis económicas, el escenario de la juventud se presenta paradójicamente difuso y fragmentado. Un panorama conflictivo como respuesta a la diferencia del “otro”. Esto da lugar al rechazo, el crimen, la brutalidad irracional y la xenofobia. Este tipo de conductas sirven de sustento para una trama de estigmas y detonantes sociales sobre los que hoy debemos reflexionar.