La recreación consiste en la transformación de todo el pueblo en 1810. El paisaje urbano del centro de El Bosque cambia para adecuarse al rigor histórico, los vecinos visten atuendos de principios del siglo XIX, los restaurantes adaptan sus menús a las comidas más tradicionales y lo más importante, las actuaciones históricas toman la localidad para introducirte de lleno en la lucha contra la invasión napoleónica.
Uno de los hechos que se recrean es que los vecinos bosqueños fueron de los primeros en levantarse ante las tropas francesas, luchando con los pocos recursos que tenían frente a un temible ejército francés. Las calles se llenarán de luchas entre bosqueños y franceses.