El Tocino de cielo es un postre de origen jerezano que cumple este año 700 años de antigüedad, según los cálculos de la asociación Hostelería de Jerez.
Para celebrarlo, los establecimientos de la ciudad se unen a esta ruta que ofrece la posibilidad de degustar el postre en sus bares, restaurantes y pastelerías, así como la recomendación artesanal que se realiza y se vende "en el Convento de Santa Rita.
La leyenda jerezana del tocino de cielo:
El origen del dulce se debe al excedente de yemas de huevo que las bodegas jerezanas tenían y que regalaban a los conventos de la ciudad, donde las monjas inventaron este rico postre a base de azúcar, agua, yema de huevo y caramelo. El motivo de que en las bodegas de Jerez sobraran las yemas no era otro que la necesidad de trabajar con la clara de huevo para clarificar los vinos.