El Señorío de la Orden de Calatrava se estableció desde el siglo XIII como la principal protección frente a los musulmanes del reino de Granada. Martos era la capital de la Encomienda de Calatrava, agrupando bajo su control a las poblaciones de Torredonjimeno, Higuera de Calatrava, Santiago de Calatrava y Jamilena. Al ser Martos ciudad fronteriza y adelantada, y ante el gran cometido estratégico que recaía sobre esta, la Orden de Calatrava mandó acometer obras de refuerzo en la Fortaleza Alta o Castillo de La Peña, así como en la Fortaleza Baja o Castillo de la Villa. Testigo de esta época son los importantes elementos patrimoniales que hoy podemos conocer e interpretar.