Practicar chikung es iniciar un camino de sanación y crecimiento personal a través de esta milenaria disicplina de la tradición china. Los suaves movimientos del chikung aportan grandes beneficios al organismo, aprenciándose en poco tiempo mejoras sensibles en la coordinación física, la vitalidad, el equilibrio o la fuerza, y también en nuestro estado mental o emocional, como una nueva serenidad ante los avatares del día a día, una bien asentada calma interior, una agradable sensación de plenitud... Una vía de desarrollo personal completo que te invitamos a conocer y practicar (siempre ofrecemos la opción de una clase gratis, de prueba). Cualquier persona, independientemente de su edad o condición física, puede practicarlo.
Actualmente están en marcha cuatro grupos de chikung, tres por la tarde y uno por la mañana, con dos profesores: Pablo Rico y Nicolás García.