Hablar en público no es una habilidad innata o heredada, por el contrario, se trata de una habilidad que se desarrolla y se aprende a través de técnicas y práctica. Poder trabajar técnicas simples para vencer el bloqueo o superar la inhibición, es una actividad que en muy poco tiempo comienza a dar sus frutos.
El miedo a hablar en público es, sin lugar a dudas, un limitador en la vida de cualquier persona, y podría decirse que expresa la necesidad de adquirir habilidades en gestión emocional. Se pueden trabajar técnicas sencillas para aprender a tener las herramientas necesarias que ayuden al individuo a gestionar esas emociones que, llegado el momento, juegan en contra.