Cada vez más, la fotografía gastronómica se va convirtiendo en puro arte, en pura inspiración. Conseguir que el cliente desee probar ese plato al instante a través de fotografías que seducen sus 5 sentidos es una tarea que precisa de creatividad y emoción.
Este taller de fotografía gastronómica está especialmente dirigido a empresas de restauración que quieren mostrar unas buenas imágenes de sus productos culinarios de cara a sus clientes actuales o a sus clientes potenciales, tanto en páginas web como en redes sociales. También a bloggeros de cocina que quieren mejorar la calidad de las imágenes que publican; escuelas de cocina y, por supuesto, aficionados a la fotografía en general que quieren indagar en nuevas experiencias.