La artista tunecina vuelve al dibujo y la acuarela con estas obras, que hablan del cambio continuo, la ausencia y la pérdida.
Casa Árabe, en colaboración con Sabrina Amrani, presenta Fugitive, obras de la artista tunecina Nicène Kossentini fruto de una residencia artística que la autora llevó cabo en la sede de Casa Árabe en Córdoba del 18 al 31 de octubre de 2015. Este proyecto, que implica un regreso de Kossentini al dibujo y la acuarela, utiliza en gran medida la geometría islámica y la estética de su ornamentación arquitectónica, inspirada por la Mezquita de Córdoba.
Fugitive se aleja del clásico diseño islámico, y más allá de indagar en las estructuras ornamentales andalusíes desde un punto de vista puramente teórico, y de utilizar estos elementos únicamente de manera formal, se centra en una búsqueda existencial in situ en la que Nicène se interroga acerca de las contradicciones y la mutabilidad de la vida y la memoria.
Inspiradas por el aspecto líquido del agua, las obras están ubicadas en el movimiento y la introspección; creadas a través de procesos extremadamente inmersivos, hablan del cambio continuo, de la ausencia y de la pérdida. Igualmente, las piezas que componen la obra definen el agua (a modo de elemento vivo) como registros de la memoria a través de vibraciones, dónde este elemento se reúne y se aísla, se conserva y se rechaza.
Como resultado, tanto el vídeo como los dibujos presentados en esta exposición, se encuentran en un estado de cambio constante. Pueden ser vistos por separado o en conjunto ya que resuenan al unísono como una partitura musical desconocida. Contra la tendencia de su habitual proceso creativo, Kossentini ha elegido seguir su intuición libremente a través del dibujo, como una necesidad.