El desarrollo de Identidades visuales es uno de los trabajos más reconocidos y significantes de entre las distintas disciplinas del Diseño. Sin embargo pocas veces se reconoce la amplitud y complejidad de estos proyectos. El diseño de Identidades visuales alcanza a la mayoría de las comunicaciones, actos y objetos con los que nos relacionamos, en casi todo encontramos el signo, el tono, el ambiente, y hasta el climax en el que la identidad visual marca, diferencia, singulariza e individualiza, al tiempo que asocia, colectiviza o reafirma la suerte de pertenencia. Explorar la sofisticación de los recursos de la Identidad visual, desarrollada tradicionalmente en los ámbitos de actuación mercantilista, propone un conjunto de potentes herramientas para la comunicación y la actuación en ámbitos públicos y culturales.
El desarrollo del diseño de Identidad aplicado a proyectos culturales debe reconocer la particularidad de su objeto como sujeto tipológico, con unas características y necesidades específicas. Localizarlas y ubicar procedimientos estratégicos en la configuración de identidades visuales sólidas y de calidad es el objetivo final de este curso.
No hay una única lengua de signos en todo el mundo, cada país posee una o varias lenguas de signos y no existe una lengua de signos por cada lengua oral ya que las lenguas de signos han evolucionado de forma natural en el contacto entre personas. Incluso varios países que comparten el mismo idioma hablado utilizan diferentes lenguas de signos.
Como muchas lenguas minoritarias, la lengua de signos ha estado muchos años marginada y relegada al uso personal pero pese a prohibiciones y obstáculos, se ha mantenido viva y su comunidad usuaria ha protegido y transmitido su patrimonio lingüístico de generación en generación. Las lenguas de signos en España han pasado de una situación puramente doméstica y restringida a una situación como la de hoy en día en la que su uso trasciende a todos los ámbitos y contextos sociales.