Aprende a elaborar y a usar tus propios fermentos. Tu salud intestinal te lo agradecerá. Plazas limitadas. Obligatorio reservar plaza.
Todas las sociedades han desarrollado la fermentación: vegetales, frutas, cereales, carnes y pescados eran fermentados. La transformación espontánea o provocada de los alimentos debido a la influencia de bacterias es un procedimiento de conservación ancestral, que mejora el valor nutritivo de los alimentos.
Son una fuente excelente de vitaminas, minerales y enzimas, contribuyendo a la eliminación de metales pesados en el organismo.
Lo ideal es hacer los fermentos en casa, ya que si se les somete a altas temperaturas pierden parte de sus propiedades.
Desde el punto de vista macrobiótico son alimentos ideales para el bienestar de nuestro sistema ya que nutren nuestra flora intestinal, actuando como prebióticos y como probióticos. Actúan como una síntesis (simbióticos) para alcalinizar el cuerpo y ayudar en digestiones, gases, malas absorciones, pesadez de estomago, etc. En el taller se enseñará a preparar y usar chucrut, kinchi, kombucha, miso, hatto...
Lo impartirá Eva Luna, de www.purogozo.es, que, entre otros, está titulada como chef en nutrición macrobiótica.