Imparte: Escuela Internacional de Naturopatía
A cada persona le llega su momento para todo…para cambiar, para empezar, para dejar, para meditar.
Apostar por estudiar naturopatía es decidirse a vivir una profesión donde podrás hacer florecer tus talentos y capacidades con libertad, autonomía y con respeto a tu creatividad.
El naturópata no es alguien que funciona con patrones previamente establecidos. Es cierto que aprende pautas, procesos, metodología, etc. pero siempre con la libertad del artista. No somos “soldados regulares” somos más bien “guerrilleros del bienestar”.
La naturopatía se adapta a tu personalidad como un guante… no serás otra persona trabajando como naturópata. Serás tú mismo desarrollando tus capacidades y descubriendo aquellos talentos ocultos que esta actividad profesional permitirá que afloren.
Ser naturópata es hacer mucho bien a los demás pero sobretodo garantizarnos nuestro bienestar, nuestra satisfacción y un futuro independiente.