La artista Marina Gadea presenta hasta septiembre la exposición El paisaje sumergido, una propuesta que combina arte, ciencia y tecnología para explorar los fondos marinos de la Bahía de Cádiz. La muestra puede visitarse en el Centro de Interpretación del Vino y la Sal y está formada por piezas que reflejan la interacción entre el ser humano, el entorno oceánico y la historia de la ciudad.
La exposición parte del concepto de la zona intermareal como espacio de transición entre tierra y mar, y propone Cádiz como una ciudad moldeada por el tiempo geológico de las corrientes marinas y el tiempo histórico de su pasado portuario. A través de una mirada que desciende bajo la superficie visible de la ciudad, Gadea reintegra en la narrativa urbana el paisaje submarino, con su topografía, sus volcanes y su memoria sumergida.
La obra subraya el vínculo entre la identidad gaditana y el océano, que se presenta como elemento poético, físico y simbólico, con un lenguaje propio que la artista traduce en formas visuales contemporáneas.