Las obras reunidas en esta exposición suponen una aproximación visual a la experiencia de la primera mirada como fundadora de la personalidad. A partir de archivos de vídeo de nuestra propia infancia, revisamos y seleccionamos una serie de fotogramas que traducimos al soporte pictórico con la intención de profundizar, esencialmente, en dos cuestiones clave: por un lado, la búsqueda de las figuras materna y paterna con las que nos identificamos; por otro, esa escisión inevitable del recuerdo entre la memoria de lo vivido y la imagen técnica que lo sustituye.