La exposición el “Arte del Renacimiento en Sevilla” analiza la actividad artística de uno de los momentos más prolíficos del arte en la ciudad en muchas de sus manifestaciones: pintura, escultura, platería, cerámica y miniatura. Se ha realizado una cuidadosa selección de obras de una calidad artística destacada, a través de las cuales se pone de manifiesto la maestría y la diversidad de influencias que contribuyen a constituir los rasgos esenciales del arte en Sevilla en ese momento de auge económico y social. El descubrimiento de América, el conocimiento del mundo como consecuencia de la hazaña de la circunnavegación, el crecimiento de la ciudad en habitantes y riqueza son factores que influyeron decididamente en el panorama artístico. El hecho de que se estableciera tempranamente en Sevilla el Puerto y Aduana con las Indias atrajo de una parte mayoritaria de Europa, los intereses comerciales de las grandes fortunas y, junto a ello, el tráfico de obras de arte y el traslado de artistas a la ciudad para satisfacer los numerosos trabajos que eran demandados por instituciones y particulares. El principal núcleo de actividad artística fue la Catedral de Sevilla, que fue culminada a lo largo del siglo XVI. Esta demanda de artistas tuvo lugar en una ciudad que hasta dos siglos antes el arte figurativo había sido nulo y su actividad artística se había centrado en la construcción de templos mudéjares, de líneas sencillas y poco dados a la ornamentación. Precisamente esta confluencia de corrientes, procedentes de culturas y lugares tan diversos como Italia, Portugal, Países Bajos e incluso Francia, junto a la tradición islámica local, fraguarán las características de la escuela artística sevillana del Renacimiento, una de las más pujantes de España en los siglos XVI y XVII. II.

Organiza: Museo de Bellas Artes de Sevilla, Consejería de Turismo, Cultura y Deporte. Dirección General de Museos y Conjuntos Culturales.

La muestra está comisariada por la directora del Museo Valme Muñoz Rubio y los jefes del Departamento de Conservación e Investigación y el Departamento de Difusión Ignacio Hermoso Romero e Ignacio Cano Rivero. III. Lugar y fechas: 1 de diciembre de 2022 a 12 de marzo de 2023. Sala de exposiciones temporales y sala V. Museo de Bellas Artes de Sevilla.

La muestra está dividida en tres ámbitos:

En el primer ámbito, titulado La contribución del Renacimiento italiano, se muestran las primeras manifestaciones artísticas del siglo. Muchas de las obras ya muestran los rasgos del renacimiento italiano, ya sea por estar realizados por artistas de esa procedencia o bien como consecuencia de la profunda difusión de la estética clásica italiana por toda Europa. Destacan aquí la Virgen de Belén de Torrigiano o La Flagelación de Alejo Fernández.
El segundo ámbito referido a La aportación de los artistas del norte, muestra obras del segundo tercio de siglo. En él puede observarse la producción de artistas del norte que se asentaron en Sevilla, poniendo las bases de un estilo local definido, como fueron Pedro de Campaña o Hernando de Esturmio. También obras llegadas entonces a Sevilla de la misma procedencia, como el excepcional tríptico de Jan Sanders van Hemessen procedente de la Parroquia de San Vicente, donde son retratados miembros de la familia de los Bravo de Laguna. El tercer ámbito, Sevilla, crisol artístico, muestra la producción de artistas de procedencia sevillana o española que han absorbido esos cambios y que, además, han sido influidos por la estética manierista, como Luis de Vargas o Alonso Vázquez. Vasco Pereira, de origen portugués formado en Sevilla, participa del mismo lenguaje manierista como se observa en la gran Anunciación procedente de Marchena.
Otras manifestaciones artísticas, como la cerámica, muestra cómo la pervivencia de la técnica cerámica ha ido adaptándose paulatinamente a los nuevos gustos. Asimismo, se pueden contemplar algunas obras relevantes de platería, que es un eficaz vehículo de transmisión de la nueva estética, que es trasladado al metal por plateros de la talla de Alfaro. Las pinturas para el techo del salón principal de la casa de Juan de Arguijo. En la sala V del museo se cierra la exposición con las pinturas realizadas para la decoración del salón de la Casa de Arguijo, hasta el momento atribuido a Alonso Vázquez. Aunque realizado ya en los primeros años del XVII en él se muestra el triunfo de la cultura clásica en Sevilla a través de unas imágenes dedicadas a los dioses del Olimpo y las musas. Restaurada hace unos años en el IAPH, por vez primera se pueden contemplar dispuestas en su disposición original suspendidas del techo.