La propuesta de esta exposición en la que se combina fotografía y poesía es mostrar un trabajo en el que de un modo consciente los artistas se muestran al mundo, sin concesiones, trascendiendo la vivencia personal a través del proceso creativo. Una vivencia doble: la de la fotógrafa y la del poeta que han generado una simbiosis en la que confluyen sus respectivas emociones, como en un juego de espejos, teniendo como elemento de unión la imagen que inspira y su propia relación de amistad. Esto es así en la mayoría de los casos porque en otros la imagen propone sentimientos que, si bien han podido ser transitados en algún momento por los artistas, no tiene por qué buscarse una correspondencia exacta con un itinerario personal realmente vivido, aunque bien pudiera haberlo sido.
Esta exposición es un recorrido por el mundo de las emociones, en ese fluir vital que nos lleva de la caída a la resurrección; el proceso que todos necesitamos para avanzar y crecer como personas. La imagen y la palabra se convierten en herramientas complementarias para darle expresión a este territorio difuso y definitivo de la experiencia humana, rompiendo la frontera irreal a veces trazada entre el mundo emocional de las mujeres y los hombres. Un proceso vital que hemos de ver como algo conectado con la esencia de la vida, su naturaleza cíclica y para el que sólo cabe la aceptación humilde que nos devuelva la alegría de estar vivos.
Juana Martín Licenciada en Pedagogía y Graduada Técnica en Artes Aplicadas y Oficios Artísticos en la especialidad de Fotografía. Si bien es una artista multidisciplinar, su gran pasión es la fotografía. Ha presentado su trabajo tanto en exposiciones individuales como colectivas. En el campo de la fotografía además de su propio trabajo ha desarrollado una importante labor como promotora de este arte tanto a nivel docente como dinamizadora desde la Asociación Huelva y sus Fotógrafos. La temática de su trabajo ha ido evolucionando desde el retrato al autorretrato que es a lo que actualmente se dedica, si bien también ha mostrado interés por la fotografía arquitectónica y la del mundo de los pequeños detalles.
Pedro Gabo Licenciado en Filología Hispánica. Ha colaborado con diversos periódicos locales como columnista de opinión. Ha impartido diversidad de talleres que han tenido la expresión literaria como eje. Tras esta exposición, presentó junto al pintor Francisco Ibáñez la muestra "Náufragos imaginados" en la que se combinaron la pintura con el relato breve. Ambos son amigos desde hace décadas, además el devenir de la vida también les ha hecho ser compañeros de trabajo, tanto en el pasado como en el presente. Este trabajo representa un gran símbolo en su relación y sólo por este hecho ha merecido la pena embarcarse en el mismo.