En un espacio con un aforo para 900 personas, los visitantes podrán ser testigos de un espectáculo de aproximadamente una hora y media de duración, dotado de iluminación y sonido, donde se narran diferentes episodios, desde la Anunciación del Arcángel San Gabriel hasta la Huida a Egipto de José, María y el Niño Dios, pasando por la Entrada a Belén o la Adoración a los Reyes Magos.
El Belén está compuesto por un decorado formado por casas y comercios típicos de la época como la la fragua, la posada, la panadería, además del clásico río, con dos puentes. La elaboración en directo de algunos productos típicos como migas, gachas o castañas asadas dotan de mayor autenticidad a la obra, además de que pueden ser degustados por el público asistente tras finalizar la representación.