Su construcción fue el fruto de una planificación exhaustiva, desde la decisión de su emplazamiento, la localización de las canteras de donde sacar la piedra, las técnicas de extracción para minimizar al máximo el retallado posterior en su puesta en obra, la organización de los animales de carga que trasladaban los sillares... y la creación de una infraestructura de transporte entre las canteras y la propia urbe.