La muestra, reúne obras claves de los artistas Alegría Castillo Roses (Córdoba, 1985) y José Antonio Sánchez Piñero (Chiclana de la Frontera, 1975), que forman el tándem ‘Alegría y Piñero’. Una serie de trabajos que son una mezcla de artefacto, escultura y performance y que tratan de la fenomenología del habla. Esta temática adquiere especial relevancia ahora que Cádiz es candidata al Congreso de la Lengua Española de 2025.
La exposición se divide en dos líneas fundamentales. Por una parte, "Moldura del habla" define una serie de obras que exploran la pronunciación de las palabras a través de la gestualidad muda. Abarca la obra "Silabario” así como un programa de molduras específico que atiende a las características del espacio donde se despliega: la Sala Blas de Lezo de la Casa de Iberoamérica.
Por otro lado está ‘Resonadores de voz’: esculturas sonoras que emulan sonidos próximos a una voz revelada en la materia en su estado más arcaico. Este apartado incluye trabajos como "Palabras en masa: ahorra", "Palabras figuradas: anhela", "Palabras figuradas: feliz", "Palabras figuradas: amarra" "Palabras figuradas: habla".
Ambas líneas están presentes en la performance "Neumas", la primera obra de la serie realizada en 2014, y “la única en la que conviven la manifestación sonora y gestual de un habla balbuceante y escurridiza cuya limitada y simple artificiosidad señala al objeto escultórico como dispositivo retórico”, según subraya el comisario de la muestra, Julio Criado, de la galería de arte Alarcón Criado.
En todas estas piezas, el lenguaje es desmembrado para hurgar en su identidad. “La voz, más allá del cuerpo, resuena en cada roce y se expresa en el objeto. La repetición nos permite apropiárnosla, sin dejar de sentirla como ajena, como voz que nos habla más allá de nosotros mismos”, expresan los artistas.
"De la caña al coro" incluirá, además de la posibilidad de visitar la muestra completa, talleres de los propios artistas con distintos colectivos de la ciudad.