La exposición presenta en torno a 800 tarjetas postales de los años 60-70 que son fruto de la labor de recopilación y coleccionismo de los comisarios de la misma: Cristina Arribas y Carmelo Vega. Las postales están organizadas en torno a 10 bloques temáticos donde se analizan distintos aspectos de su morfología, composición y sobre todo, su relación con la fotografía y el diseño. Asociadas al desarrollo del fenómeno del turismo, las postales consolidaron una doble estrategia funcional: como sistema de reconocimiento y memoria (en la categoría de souvenir, atractivo y muy barato, del viaje) y como instrumento de definición y afirmación de las experiencias viajeras.
La fotografía y la postal
Desde el momento mismo de su aparición en 1839, la fotografía se convirtió en un sucedáneo vivencial del viaje contemporáneo: ¿para qué arriesgarse a los peligros y a las fatigas del viaje si estas nuevas imágenes podían mostrarnos los diversos aspectos, detallados y precisos, de cualquier parte del globo? Los fotógrafos viajeros de aquel siglo contribuyeron a crear y completar el inventario general de ese mundo conocido y por conocer, registrando sus paisajes y rincones más significativos y remarcables, señalando lo interesante, ordenando características y tipologías, archivando identidades para, así, acabar definiendo estereotipos fácilmente identificables. Se trataba, por tanto, de saber cómo eran los lugares, cómo debían ser vistos y cómo tenían que ser representados.
Cuando la fotografía –como método de producción, enumeración y exhibición de todos los mundos posibles e imaginables– se asoció con las tarjetas postales –como sistema estandarizado de comunicación universal–, no sólo suministró infinitos recursos visuales para componer sus anversos vacíos sino también esas lógicas clasificatorias que ya la habían distinguido hasta entonces. La postal turística heredó, amplió y “mejoró” los procesos fotográficos de construcción y reducción de la realidad en meras imágenes, en proyecciones categóricas de territorios, de costumbres y de objetos, en ejemplos particulares de la diversidad y de la otredad humana, en paradigmas normalizados de identidad y de representación.
Visitas guiadas todos los jueves a las 19 horas y los sábados a las 11 hasta el 8 de septiembre de 2024, excepto la primera quincena de agosto.