Se presentan en esta exposición las obras seleccionadas para el Premio Granada de Fondo, que se fallará a la finalización de la muestra. Está compuesta por las obras presentadas por los artistas finalistas: Álvaro Albaladejo, Ángeles Cutillas, Paloma Gámez, Ricardo García, Belén Mazuecos, Cristina Megía, Fernando G. Méndez, Pedro Morales, Leonor Solans, Miguel Ángel Tornero, Pablo Trenor, Roberto Urbano y Domingo Zorrilla.

La buena acogida deparada a los Premios a la Creación Artística convocados en 2020 en respuesta a la crisis sanitaria ha animado a la Diputación de Granada a repetir la experiencia, esta vez rescatando su propia historia y ampliando las miras en dos sentidos: otorgar un solo premio, pero mejor dotado, y hacerlo a través de una convocatoria abierta a la participación de artistas de cualquier procedencia. El tema es el de la Colección de Arte Contemporáneo de la Diputación: Granada de fondo, es decir, cualquier representación que en la actualidad pueda hacerse de Granada.

Esta colección se inició a finales de los ochenta, cuando la institución puso en marcha un programa destinado a acrecentar su patrimonio artístico con la adquisición de obras contemporáneas, empezando por las de autores granadinos muy relevantes pero poco o nada representados en las colecciones públicas de la provincia, como José Guerrero o Manuel Rivera. El conjunto continuó nutriéndose hasta principios de los 2000 con obras firmadas por artistas no solo granadinos, pero cuyo tema sí lo era, con piezas que ya estaban en el patrimonio de la Diputación y con donaciones que aportaban matices que la enriquecían. Todo ello dio lugar a un corpus coherente de gran calidad y personalidad propia del que se fueron haciendo catálogos y exposiciones periódicas donde se presentaban las nuevas adquisiciones. Con ocasión de la última de ellas, Yolanda Romero recordaba en 2003 los horizontes hacia los que se miraba para renovar el imaginario, superando tópicos pintoresquistas heredados:

«Queríamos crear una colección verdaderamente singular, diferente de otras muchas que museos o entidades bancarias del resto del país iban configurando con diferentes criterios. Queríamos una colección temática compuesta por obras que estuvieran relacionadas entre sí y que tuvieran un hilo conductor que las pusiera en comunicación. Queríamos una colección que tomando Granada como pretexto (su historia, sus mitos, su paisaje, sus personajes, su realidad social, cultural y política, sus contradicciones, sus verdades y también sus mentiras...) reflejara y fuera testimonio de la compleja actualidad que vivimos. Nuestra pretensión era y sigue siendo que las obras de la colección hablasen, como ha señalado Eduardo Quesada Dorador, “de un modo universal de cosas universales vistas en Granada o desde Granada, y vistas también, inevitablemente, desde al ángulo radicalmente personal que es condición sine qua non de ser artista. Todas las razones locales de esta colección son razones universales”».

Con la convocatoria del Premio Granada de Fondo, la Diputación de Granada renueva el impulso que merece su Colección de Arte Contemporáneo, con el objetivo de incorporar al patrimonio público nuevas obras de artistas en activo, entre una nómina en la que ya figuran primeros nombres del panorama contemporáneo español e internacional.