Durante su estancia parisina (1907-1914), Falla perfeccionó su arte, alcanzó el reconocimiento internacional como compositor y trabajó en algunas de las obras fundamentales de su catálogo como las Cuatro piezas españolas o Noches en los jardines de España
Aunque el desencadenamiento de la I Guerra Mundial le obligó a regresar a España, Falla siempre mantuvo un estrecho contacto con París.
Propuesta de Yvan Nommick y Rafael del Pino.