Muestra de libros tipo pop-up, desplegables o libros móviles.
Se trata de una pequeña, pero intensa muestra proveniente en su mayoría de la colección personal de Paco Abad y Beatriz Ríos Saavedra. Una miscelánea de ejemplares hermosos y curiosos contemporáneos de libros móviles que esperan que haga disfrutar y sentir que los libros de papel están más vivos que nunca.
Perdura de manera general, la idea de que los libros pop-up o desplegables son para niños, pero esta percepción va cargada de una actitud esnobista sobre lo que es serio y lo que no. Por lo que se sabe, se cree que el primer libro en el que se utilizó un mecanismo elaborado de papel es un manuscrito sobre astrología de 1306. A partir de ahí y hasta el siglo XVIII estos libros móviles se utilizaban sobre todo para trabajo académico, es decir, para estudiosos de algunas disciplinas como la medicina (en concreto, la anatomía ya que capas, recortes, troqueles y solapas podían mostrar cómo es el cuerpo humano de una manera más semejante a la realidad) o la astronomía, la navegación e incluso la astrología. A partir del siglo XVIII se le da más uso relacionado con el entretenimiento.
Ya en el siglo XX, concretamente, a partir de la década de los 90, hubo un renacer de estos libros. Los ingenieros del papel e ilustradores consiguen captar la atención literaria de medios muy prestigiosos. David A. Carter, Robert Sabuda y Matthew Reinhart son renombrados ingenieros del papel gracias a las innovaciones que desarrollaron en sus libros, consiguiendo increíbles efectos e incluso malabarismos. Y esto lleva al lector a un punto clave del éxito actual de estos libros. No es sólo lo que se consigue una vez se ha pasado la página o abierto la portada. No es sólo la construcción de papel resultante lo importante o lo hermoso, sino que la magia de estos libros también procede de lo que sucede mientras se abren esas páginas o esa portada. No es solo cuestión de añadir una evidente tercera dimensión al papel, ya que se le añade una cuarta dimensión: el tiempo, con lo que resulta el movimiento. Nunca será más acertado llamarlos libros móviles que cuando ocurre eso.
De todos los autores nombrados anteriormente y muchos más el visitante podrá ver ejemplares en ‘Palabras Desplegadas’. También podrán disfrutar de indispensables clásicos de la literatura infantil, cómics, series televisivas de actualidad, libros divulgativos, de poesía en inglés, francés, alemán o español y se trata de una pequeña, pero intensa muestra, totalmente subjetiva, una miscelánea de ejemplares hermosos o curiosos contemporáneos de libros móviles.