Obras sobre pael y fotografías de Elma Hache.
En palabras de la autora: Este proyecto es un viaje sensorial de luz, agua, color y piel, navegando entre dos atmósferas: aire y agua, entre dos mundos: vigilia y sueño, entre dos sustancias: cuerpo y espacio. Es necesario detenerse en la vorágine de la vida y hacer introspección, adentrarse en el líquido elemento del interior de uno mismo, sumergirse en ese lugar sin tiempo donde todo es posible… Atravesar el espejo y tener el coraje de pasar al otro lado, el lado de las emociones, representadas en casi todas las tradiciones por el elemento agua. Somos agua, las tres cuartas partes de nuestro peso corporal son agua. El agua es el 85 por ciento de nuestra sangre, el 75 por ciento de nuestro cerebro, el 70 por ciento de nuestros músculos y hasta el 22 por ciento de nuestros huesos. El agua le da el color a nuestro planeta, el planeta azul, ocupando tres cuartos del mismo… La vida en él comenzó en el agua y nuestra vida comenzó en una cuna acuosa de líquido amniótico. Esta serie de fotografías utiliza el fondo del mar como contexto para llevar al espectador hacia una atmósfera ingrávida, en la que los elementos agua y aire se confunden entre sí para crear nuevos espacios, donde lo mismo se puede flotar, volar o danzar. Elaborando un lenguaje onírico de formas pictóricas que ensalza la belleza de los cuerpos tatuados por la luz reflectada por el agua.