Del fotógrafo norteamericano Jeffrey Silverthorne.
En esta exposición, se muestran géneros como el retrato, el desnudo, la muerte o el autorretrato. En el primero a menudo los modelos están desnudos y asumen posiciones poco realistas y en el que el encuadre, la iluminación y atrezzo crean una atmósfera extraña. En la serie ‘Susana y lo viejos’ (2004-2007) la fantasía de juegos parece haber dado paso a lo grotesco. Los autorretratos son frecuentes. Bajo la influencia de Rembrandt y Beckmann, estos describen consideraciones sobre el tiempo, así como el lugar y el papel del artista. Jeffrey Silverthorne retrata su propio cuerpo envejecido en situaciones extrañas, en compañía de mujeres jóvenes desnudas, haciendo alusión a la historia bíblica que da título a esta serie. Por último, contemplamos la serie ‘Trabajos de Morgue’ (1972-1991). El autor estaba autorizado a fotografiar la morgue de Rhode Island, donde poco a poco elimina toda referencia al contexto y se centra en los cuerpos. Esta obsesión le deriva a raíz de la muerte prematura de su padre. Sin embargo, también logra transmitir una imagen más suave, incluso, sensual, de los cuerpos que parecen estar durmiendo. Las fotografías en color refuerzan esta ambigüedad. La vergüenza y repulsión dan paso a la fascinación provocada por la delicadeza de los colores y el asunto de la carne destruida, degenerada.