Palo Cortado es un vino. Pero también es una forma de ver la vida.
El origen del Palo Cortado es muy antiguo y artesanal, procede del tiempo en que todos los vinos finos fermentaban en botas (barriles de 500 litros), y por consiguiente se daban múltiples variables enológicas, que provocaban sutiles diferencias entre vinos de la misma cosecha.
Algunos de estos vinos jóvenes cuya procedencia es el mosto de uva palomino de las campiñas andaluzas, resultan extremadamente finos y aromáticos, por lo que los capataces de las bodegas productoras tomaron la práctica, aún vigente, de señalar con tiza estas botas con una raya oblicua o un “palo”. En estas botas marcadas se había producido una “oxigenación accidental”, al romperse el velo de levadura que procura la fermentación anaeróbica, que es característica y definitoria de la maduración de este tipo de vinos. Se produce una oxigenación accidental. Esta peculiaridad da un aroma especial y delicado.
En una valoración posterior, finalizada la fase de sobretablas, se constatará por los catadores si el vino de cada una de esas botas marcadas, continúa teniendo unas características especiales, lo que se ilustrará en la superficie de madera de esas botas con una raya horizontal que cortará el “palo”.
Esta segunda marca que corta el palo, confirma el cambio de un proceso natural, de crianza biológica anaeróbica, a una crianza oxidativa con encabezado alcohólico, produciéndose la transformación definitiva que da lugar a este vino más aromático, más complejo y más estructurado, el Palo Cortado.
De igual forma este Proyecto Fotográfico, Palo Cortado, nace de una reflexión conceptual que habla de transformaciones naturales o no. Reflexión sobre orígenes y recorridos ligados al agua, a la tierra y a la piedra, génesis de la urbe que el ser humano construye, habita y transforma. Pero ha sido en ese momento excepcional que corta radicalmente nuestra normal existencia, cuando se ha consolidado este trabajo creativo. Se trata pues, de un proyecto conceptual, en el que las imágenes van definiendo percepciones reflexivas e intencionadas.
Se plantea en esta muestra fotográfica, cómo a través del proceso de “oxigenación de la fotografía”, se pueden mostrar imperfecciones, desenfoques, líneas dispersas o concentradas, superposiciones, elementos que darán a las fotografías ese respiro, esa oxigenación que brinda finalmente un nuevo aliento a cada fotografía.
Se busca resaltar, dentro de la imagen final, los elementos que estaban ahí, pero al no mostrarse evidentes, pasaban desapercibidos y no podían ser estimados.
De esta forma también en la fotografía, a través de un proceso de oxigenación, consciente y buscada en este caso, se produce una evolución de la imagen cotidiana y conformándola más compleja y llena de matices. Se produce así una nueva narración de la imagen, o más exactamente unas nuevas narraciones, puesto que cada espectador, cada visitante aplicará su mirada interesándose por algunos detalles, pero no por otros.
Palo Cortado contiene varias historias, at través de más de 200 imágenes que van definiéndose en diferentes capítulos : Prólogo, Tierra, Agua, Río, Muelle, Formas, Luces, Líneas, Piel, Velo, Fiesta, Ciudad, Polígono y Epilogo, en ellos va siguiéndose el río como los toneles que llegaban a la ciudad desde la desembocadura.
El origen de la vida está en el agua. El mar como fuente de vida y el río como eje de comunicación: fuente de vida, la una, y origen de la ciudad, el otro.
Esa ciudad que nos habita y en la que habitamos nos va conformando con sus estructuras, con sus formas, con la monumentalidad de su presencia
Este es el hilo conductor que se va presentando a lo largo de los diferentes capítulos, elementos que componen esta Muestra Fotográfica Palo Cortado
MACHÍO