Querido A. es un proyecto que recoge la correspondencia mantenida por la pintora Silvia Cosío y el crítico de cine y editor Alfonso Crespo entre los años 2013 y 2020. El origen de esta sacra conversazione son las obras de la artista, el cuadro acabado al que se le imagina un contexto, una intención, un haz de virtualidades que termina por expresar un delirio compartido. Así, en un palimpsesto de fotogramas y reflexiones filosóficas, antropológicas, estéticas y literarias, el resultado del diálogo se asemeja a un collage, una mesa revuelta, una Wunderkammer o gabinete de curiosidades que, en cinco entregas, acompañan a sendas obras pictóricas.
Los autores-actores de este dilatado encuentro han querido señalar, de manera fragmentaria y asistemática, la pervivencia de los símbolos, los elementos inconscientes de las imágenes, estableciendo simetrías, analogías y contrastes, no muy lejos de la estela de André Malraux y su Museo Imaginario. La esencia de la muestra, más allá de cualquier discurso narrativo, lineal o lógico, responde a la acumulación simultánea de materiales, referencias librescas, citas, fotogramas, extractos de películas o montajes audiovisuales, a partir de los que se pretende, final y paradójicamente, celebrar con impureza la pintura, principio y fin del proyecto.