Exposición de la artista Concha Jiménez.
La artista retrata e ilustra "su mundo" con insistencia. Las distintas técnicas y apariencias del mismo personaje y los numerosos autorretratos, denotan una necesidad constante de cambiar.
Cada imagen parece querer liberarse de la imagen anterior y, al mismo tiempo, se encuentran y se suman dando lugar a una identidad variable.
Acrílico, acuarela, témpera, óleo... El uso de distintos soportes como el papel, la madera o el lienzo, etc. hablan de esta falta de constancia. Pero también de la exigencia de crear distintas identidades, y como dijo el poeta y escritor que tantos heterónimos usó, de "la necesidad de aumentar el mundo con personalidades ficticias".