Planta segunda de la Colección permanente
De las innumerables regiones que Sorolla visitó y pintó en España, sin duda Andalucía ocupó un lugar muy destacado. Entre los años 1902 y 1918 Sorolla realizó continuos y numerosos desplazamientos por tierras andaluzas que le llevaron por las provincias de Málaga, Granada, Sevilla, Huelva, Córdoba, Cádiz, tanto por sus ciudades como por sus pueblos. La fascinación por sus paisajes y sus monumentos, el interés por sus gentes y sus costumbres quedó reflejada en un importantísimo número de obras inconfundibles de las que aquí presentamos una pequeña pero significativa muestra de cómo Andalucía captó la atención y la admiración de este pintor infatigable y viajero pertinaz.