XIII EDICIÓN.
Por medio de una representación, a modo de catequesis itinerantes, un nutrido grupo de soleanos – en torno a las 450 personas de diversas edades están implicadas, entre actores, narradores, figurantes, personal de apoyo, decoradores, montadores,… – dieron vida a un guión, a medio camino entre las Sagradas Escrituras y la versión para la escenificación, que, en ocho escenas, representa desde la Anunciación a María hasta el nacimiento del Señor.
El escenario escogido no es cualquier calle de Alcalá del Río. La zona árabe, de intrincado urbanismo, compuesto por calles estrechas, con curvas, esquinas,…, semejará las calles de Belén, que, además, estaban decoradas y tematizadas para hacer que la representación ganase en realismo.
Antorchas en las paredes, vecinos de la antigua Belén paseando, mendigos, hilanderas, herreros, castañeras,… muchos y variopintos personajes apoyarán, como figurantes, la narración. Los ropajes son fruto de una concienzuda búsqueda tanto de referentes – documentales, principalmente – como de tejidos para conseguir, aún más, la reproducción de la realidad y la fidelidad a los hechos y momentos histórico.